Los cuerpos graníticos del Nevado del Famatina
José P. LÓPEZ1
1Instituto Superior de Correlación Geológica, Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo, UNT, Miguel Lillo 205, (4000) Tucumán, Argentina.
Como parte de sus investigaciones geológicas en la parte meridional de la provincia de La Rioja, Bodenbender (1916) describe al “Nevado del Famatina” y haciendo referencia únicamente a las rocas eruptivas de este sector de la sierra, señala que “el intrusivo “granito-diorítico” se reconoce en tres zonas más o menos paralelas”. “La primera zona está formada por el “cristalo-granito” de dos micas que compone la cadena Chilecita-Paimán, que se vincula orográficamente con la sierra de Famatina, pero geológicamente con la de Velasco.” Esta zona corresponde a la unidad denominada actualmente Granito Paimán y que se describe como constituido principalmente por granodioritas y monzogranitos porfiroides de grano grueso.
La segunda zona, está constituida por rocas que “..se acerca ora a la sienita cuarcífera ora a la Diorita cuarcífera (en parte lamprófiro) que pasa en transición a granito biotítico” y corresponde al actualmente denominado Granito Ñuñorco que afloran en el área central entre los granitos Paimán y Cerro Toro. Estos intrusivos se clasifican como granodioritas y monzogranitos biotíticos.
La tercera zona “abarca la sierra encumbrada con sus contrafuertes occidentales y se caracteriza por la presencia de granitos, granito-dioritas, con predominancia de aplitas y en la que son importantes las dioritas cuarzosas, gabro anfibólico, además de lamprófiros”. Rasgos notables de estos granitoides es la ausencia de pegmatitas - más comunes en la sierra de Sañogasta- y la presencia de enjambres de diques lamprofíricos tardío a postectónicos.
En la actualidad, las tres zonas definidas por Bodenbender, conservan parcialmente su validez, especialmente en los aspectos relacionados con las características petrográficas de los intrusivos. Los estudios posteriores, en particular los más recientes, en los que se hacen hincapié sobre los rasgos geoquímicos y nivel de emplazamiento marcan algunas diferencias en cuanto a esta zonación y caracterización. Pese a ello es necesario resaltar que aún hoy en día tienen vigencia el detalle y precisión de las observaciones realizadas hace casi un siglo por este autor.